(TSL) San Luis fue superado nuevamente este sábado, ahora le toco a León volver a la senda del triunfo a costillas del equipo sanluisino que por partes del partido se vio como un equipo sin idea, un equipo que no sabe a lo que juega cuando saltan a la cancha semana tras semana.
Nuevamente los tres factores del equipo se hacen presentes: directiva, equipo y afición.
Habría que definir las obligaciones de la directiva, cuales son y en que consisten; desde fuera podemos decir que debe cuidar los intereses económicos, comerciales y deportivos además de ser un punto de enlace con los dueños del mismo y con la afición; podemos inferir por lo que hemos visto que los dos primeros puntos están cumplidos con creces, la comercialización del equipo es buena si a simple vista vemos la cantidad de anunciantes y de alianzas comerciales, creo que ahí no hay problema alguno con las cuentas para el señor Enrique Borja, también debemos decir que la comunicación mejoró a lo que se venía manejando, sabemos su opinión y sale a desenmascarar los borregos que lanza la prensa nacional. .
Curiosamente, el aspecto deportivo es el que anda fallando en un equipo deportivo profesional, los números ahí no favorecen a la directiva, lugar común es decir que se han conseguido solo dos puntos de veintiuno aunque lo peor es que no se sabe a que juega el equipo; el profesor José Luis Trejo le dio cierto orden pero no bastó para anotar mas goles de los recibidos en el transcurso del torneo, un orden en el que cualquier error de concentración provocaba huecos en las lineas por donde pasaban los delanteros rivales para anotar y echar a perder el trabajo no solo del partido sino de la semana, un orden que no permitía a los jugadores salir de su posición para apoyar en labores defensivas u ofensivas a su compañero quien generalmente se ahogaba en la misma jugada al no encontrar el pase o el centro que permitiera terminarla; en Puebla sello su destino al ser destituido del puesto y relevado por Alex Aguinaga quien pidió una oportunidad frente al equipo. En su primer partido contra Jaguares un equipo se vio más suelto y con exceso de entusiasmo, se quizo repetir la dosis con León, un equipo que viene trabajando junto desde hace mas de un año con resultados lógicos, los panzas verdes le pasaron por encima a los auriazules dejando muchas dudas y exhibiendo los jugadores cierto enojo para con sus compañeros como para la tribuna.
Si bien en la tabla general del apertura 2012 el equipo marcha con solo dos puntos como penultimo lugar general es lo que por lo pronto no debe importar tanto, debemos voltear a la tabla de los cocientes en la cual, de la enorme distancia que llevaba sobre los coleros ahora esta a solo once puntos de Gallos Blancos, a nueve del Atlas y a dos de Puebla.
Las cosas no están para experimentar, si el señor Aguinaga se queda o quien llegue debe comprometerse a cosechar puntos de a como sea, incluso si sacrifica por algunos partidos el espectáculo, ya habrá tiempo de jugar al tú por tú con los mejores de la liga, este no es el momento.
Con hablar del entrenador hacemos el pase al resto del equipo, no me parece que haya un equipo limitado como algunos presumen, teniendo a dos seleccionados nacionales, uno de Colombia y otro de Estados Unidos, otros jugadores que sin ser seleccionados pasan por las lineas rivales generando oportunidades de gol, ya sea que se concreten o no y un portero de primerísimo nível, me dice que solo se necesita la tranquilidad que aparentemente se esta perdiendo entre los propios jugadores y que el entrenador en turno evalué las fortalezas y debilidades para hacerlo jugar de acuerdo con las características propias de los jugadores.
De la afición puedo decir que esta en su derecho de estar enojada, se paga un boleto para ver un espectáculo deportivo pero termina siendo un verdadero calvario emocional al ver a un equipo que no gana; lo único que se puede decir es que se siga apoyando, el respaldo para con los jugadores viene de la tribuna y en gran medida es lo que impulsa para hacer bien las cosas, pero la presencia debe ser permanente al estadio, dejar la voz en el oído de los jugadores y en la de los rivales para hacer que el estadio pese como alguna vez lo hizo.
Creo que es labor de todos sacar al equipo del bache en el que esta, exigiendo que los jugadores, directiva y cuerpo técnico reaccionen en la cancha mientras que la afición apoya; hacer las cosas bien desde arriba para que el fanático este contento.
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